Salsas para barbacoas
La salsa chimichurri es la estrella de los asados argentinos. Esta salsa casera para carnes a la parrilla es un aderezo perfecto para piezas como los chuletones. La base de sus ingredientes se compone de vinagre, aceite de oliva, perejil, ajo, ají molido (chile) y sal.
Existen muchas formas de hacer el chimichurri pero una manera de elaborarlo con ingredientes accesibles es incluir ajo orégano, tomillo, comino, perejil picado y pimentón dulce en medio vaso de aceite de oliva y otro medio de vinagre
La salsa castellana es una de las salsas más tradicionales de nuestra gastronomía a la hora de acompañar preparaciones de carne, se utiliza para carnes a la parrilla o al horno. Los ingredientes principales de la castellana son : Vino, cebolla, ajo, caldo de carne o Pollo, champiñones y jamón.
La salsa castellana, como casi todo en cocina, tiene muchas variantes. Hay personas que les agrega zanahoria o un sofrito con mas verduras. Hay personas que en vez de bacon les pone taquitos de jamón ibérico… cualquier variantes es siempre bien venida y muy rica. Yo que ustedes las probaría todas porque todas están bien ricas.

Entre los
ingredientes más habituales en las recetas de mojos se encuentran: la pimienta
palmera (un tipo de pimiento pequeño), el pimiento (verde y rojo), perejil, el
ajo, la sal, el pimentón, el comino o el cilantro, el aceite girasol, pan duro, aove y el vinagre.
Los mojos
se pueden clasificar en dos grandes familias, según los ingredientes
utilizados: los mojos verdes y los mojos rojos. Los mojos verdes más habituales
en las mesas canarias son, el mojo verde propiamente que es más utilizado para
pescados, preparado con pimientos verdes, el mojo de cilantro. Si bien el mojo
verde puede conservarse fuera de la nevera durante mucho tiempo, la presencia
de agua en el mojo de cilantro obliga a consumirlo como máximo a los pocos días
de prepararlo. Los mojos rojos más habituales se componen de pimienta palmera
(o "picona") y pimentón y suelen acompañar la carne. Al carecer de
agua en su composición también pueden conservarse durante mucho tiempo fuera de
la nevera
Preparar
Tostamos la guindilla con el comino, cuidado que no se queme, añadimos el aceite mitad girasol y mitad aove y añadimos la cabeza de ajo la tostamos y añadimos el pimentón mitad picante y mitad dulce, al final añadimos el vinagre y el pan duro y lo trituramos todo.
En el caso
de los mojos de cilantro y perejil el picor viene regulado por la cantidad de
ajos que haya en su composición. Su sabor aumenta si se le añade semilla de
cilantro triturada.

La salsa se prepara con los siguientes ingredientes:
Tomates y ajos, asados preferiblemente en horno de leña. Si se prepara en casa, horno eléctrico o de gas. Pan, que en unas recetas va frito y en otras se usa la miga sin freír. En ambos casos se maja junto con el ajo. Un majado de almendras y avellanas tostadas, si bien hay recetas que omiten las avellanas. Unos pimientos rojos secos. Los originales se llaman "cuerno de cabra", que se asan justo para cristalizarlos ya que de lo contrario amargan, en su defecto se usan ñoras. Aliño: romero, aceite de oliva, vinagre, sal y pimienta.
Como suele pasar con los platos populares, hay casi tantas versiones como cocineros, pero las diferencias son menores. Algunos sustituyen una parte de almendras por avellanas, que se cultivan en la tierra originaria del romesco. En general se añade más aceite cuando se quiere una salsa más suave y líquida, o pan frito o carquinyolis (una galleta típica que contiene almendra,es muy crujiente de la zona de Tarragona de donde es esta salsa) si se quiere espesarla. Para dar sabor y un toque personal se añade, según el cocinero, ajo crudo, guindilla, pimentón, etc.
De sabor ligeramente picante (pero no obligatoriamente) se usa para acompañar carnes, verduras y pescados. También pueden acompañar a los calçots aunque estos, en rigor, se deben acompañar de salsa salvitxada, que es ligeramente diferente, ya que se usa mayor cantidad de tomate asado y menos ñoras.
Pimiento de Romesco: en origen se trata de un pimiento llamado cuerno de cabra, por ser de una sola punta y curvado como los cuernos de dichos animales.

Esta salsa será perfecta para acompañar un buen chuletón en una buena barbacoa, hacer unas alitas de pollo al horno en salsa barbacoa o como no, unas costillas de cerdo con salsa barbacoa… una delicia. Además al tener azúcar y vinagre, ya tenemos varios conservantes naturales, por lo que en la nevera, bien cerrado el bote, nos durará bastante la salsa.
Ingredientes:
1 cebolleta
1 cucharada de mostaza
2 cucharadas de salsa Perrins o salsa worcestershire, una clásica salsa inglesa
1 cucharada de pimentón dulce de la Vera
2 cucharadas de azúcar moreno
1 cucharada de aceite de oliva virgen
4 cucharadas de vinagre
3 cucharadas de ketchup
2 cucharadas de miel
200 gramos de salsa de tomate casera o tomate frito de bote
1 cucharada de salsa de soja
Media cucharadita de pimienta negra molida
Preparación:
Lo primero será preparar todos los ingredientes. Son muchos, así que mejor tenerlos listos para poder saber si los hemos añadido o no, así nos aseguramos.En una sartén, pochamos a fuego muy lento la cebolla, cortada muy fina, casi “microoscopica” ya que luego no queremos encontrarnos trozos muy gordos en la salsa.Una vez pochada a fuego lento y cuando la tengamos totalmente transparente. Añadimos las cucharadas de azúcar moreno. Dejamos caramelizar durante unos 5 minutos a fuego lento.Pasado ese tiempo, agregamos el tomate y cocinamos otros 5 minutos.Añadimos el resto de ingredientes y dejamos cocinar a fuego lento 15 minutos. Podemos ponerle un toque de pimentón picante o pimentón ahumado para darle un sabor ahumado, pero eso ya es a elección del consumidor.Retiramos del fuego y dejamos templar. Luego la metemos en la nevera para que enfríe. Ya estará lista para acompañar todo tipo de carnes.
Una de las salsas más típicas de nuestra gastronomía, la salsa de alioli casera, que viene de all-i-oli (ajo y aceite, sus dos ingredientes básicos). Acompaña gran diversidad de platos, como los asados de carne, las clásicas patatas con ajo, en ensaladas de verano, con carnes y pescados, con arroz… vamos, que tienes que aprender a hacerla ya porque vas a poder incorporarla a un montón de platos. Esta receta de alioli la hago con batidora porque así es más difícil que se te pueda cortar la salsa.
Y si te gusta elaborar salsas de forma casera, prueba la equivalente del alioli sustituyendo el huevo por leche, la famosa lactonesa con ajo. Y si te encantan estas salsas en las que solo necesitas mezclar los ingredientes
Ingredientes (para hacer unos 250 gr):
1 huevo
1/2 vaso (100 ml) de aceite de oliva y 1/2 vaso de aceite de girasol. Si quieres hacer más cantidad de ajo, simplemente aumenta la cantidad de aceite y dientes de ajo, manteniendo el resto de ingredientes.
1-2 dientes de ajo (según si lo prefieres más fuerte o suave).
Una pizca de sal (la punta de una cuchara de café).
El zumo de 1/2 limón.
Preparación:
Empezamos con un truco: si quieres un alioli que no repita y de sabor un poco más suave, introduce el ajo unos 10 segundos en el microondas o cuécelo 2 minutos en agua hirviendo, y utilízalo para preparar el alioli. En el vaso de la batidora, introduce los dientes de ajo, el huevo crudo, la sal, el aceite y el zumo de limón. Deberás colocar la batidora en el fondo del vaso, totalmente plana, y empezar a batir sin moverla en absoluto. Cuando notes que empiece a emulsionar la salsa por la parte inferior (significa que empieza a espesarse), eleva el brazo de la batidora hacia arriba y hacia abajo, con movimientos suaves, hasta que toda la salsa quede espesa y homogénea, sin grumos ni restos de ingredientes.
Esta maravilla es un clásico. Contiene mayonesa, mostaza y pepinillos en vinagre muy finamente picados; también alcaparras, aceitunas, cebollas y rábano. El nombre de esta salsa proviene de las tribus tártaras de Mongolia y combina estupendamente bien con platos fríos y calientes, especialmente con pescados, mariscos y verduras. Se puede usar también como aliño de una ensalada, y si lo pruebas con el bacon… ¡te sorprenderá! El límite lo ponéis vosotros.
La Salsa Bearnesa no es más que una variante de la salsa holandesa, a la que se le incorpora un poco de vinagre haciéndola más ligera. Su origen es Francés. Y puede acompañar a cualquier carne. Salsa para carnes a la parrilla, templada. Ojo con el sol y las temperaturas altas a las que se deje expuesta por tiempo, ya que lleva huevo.
Ingredientes:
60 gr de Chalotas
250 gr de Mantequilla
150 ml de Vinagre de vino Blanco
4 Yemas de huevo
1+1 Cucharada de Estragón picado
1 Cucharadita de Pimienta
Sal y Pimienta
Elaboración:
Derretir al baño maría la mantequilla para obtener una mantequilla clarificada, es decir retirar y conservar la espuma que es la proteína de la leche que utilizaremos para emulsionar la salsa. Pelar y picar las cebollas muy finitas.Mezclar las chalotas, la pimienta y una cucharada de Estragón junto con el vinagre. Reducir la mezcla a fuego medio prácticamente hasta haber perdido todo el vinagre. Incorporar las yemas junto con dos cucharadas de agua fría y batir con varillas de 6 a 8 min. a fuego medio.Sin dejar de batir (como si de una mayonesa se tratase) ir incorporando la mantequilla clarificada vertiendo un hilito. Salpimentar y pasar por un colador fino.Añadir una cucharada de estragón picado antes de la presentación.
Perfecta para el Pollo como para la Ternera. La única variante es cambiar el fondo con un caldo o bien de pollo o bien de ternera según la pieza a la que acompañe. Salsa para carnes a la Parrilla que se puede servir caliente o Templada
Ingredientes:
150 ml de Caldo de Pollo o Ternera
150 ml de Nata liquida
1 cucharada sopera de mostaza fuerte
1 cucharada sopera de mostaza a la Antigua
Sal y Pimienta
Elaboración:
Calentamos el caldo hasta que llegue a ebullición Se añade la nata liquida y se salpimienta. Se reduce hasta obtener una salsa espesa. Se añaden las cucharadas de mostaza y se mezcla a fuego lento evitando que hierva.
La receta de la salsa de queso es la mar de sencilla. Entre las recetas de salsa hay algunas más complicadas y otras, como esta, que llevan poquitos ingredientes y se hace en un abrir y cerrar de ojos.
Para acompañar los platos de carne, un buen solomillo al queso, unas patatas asadas con unas salsa maravillosa y un buen montón de combinaciones que seguro se te ocurren nada más verla.
Ingredientes:
Para 300 ml. de Salsa
200 ml. de Nata para Cocinar
100 g. de Queso (Roquefort, Azul, Parmesano,...El que prefieras)
1 Chorreón de Brandy
Sal
Elaboracion:
Para hacer la salsa de queso lo primero será coger la sartén o el recipiente donde la vayamos a hacer. Pondremos la nata a calentar. Mientras coge temperatura le añadiremos el queso que vayamos a hacer en trozos. También podemos usar queso rallado. Pasados unos minutos veremos que el queso comienza a derretirse. Ese es el momento de añadirle el chorreoncito de coñac. Si no quieres puedes prescindir de él, pero le da un toque muy rico. También es el momento de ponerle un poquito de sal. Pasados un par de minutos que nos aseguremos que el alcohol se ha evaporado lo retiramos del fuego. Comprobamos que no quedan trozos de queso y se ha derretido todo por completo.
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